Jardín de meditación
en el nuevo cementerio de Neubiberg, 2000
El jardín de meditación es una oferta contemporánea para la introspección, la recogida y el encuentro en recuerdo de los difuntos. Está diseñado para que la estructura arquitectónicamente protegida acompañe al visitante del cementerio de vuelta al mundo como patrón básico. Estimulada por el olor y el aspecto de las hierbas medicinales, la gente camina entre las losas del suelo que se corresponden con la arquitectura. Se acentúan en puntos especiales con paneles de terracota curvados hacia dentro y hacia fuera. Modeladas a partir de tierra cocida, sus superficies estimulan el tacto y su forma recuerda a las estructuras primordiales que encontré en un viaje al microscopio.
El viaje al microscopio:
En el laboratorio surgen imágenes que inmediatamente se parecen poco a estructuras con las que estamos familiarizados y al mismo tiempo evocan recuerdos de plexos oníricos que encontramos en la fase REM. Cuanto más se adentra uno con el SEM (microscopio electrónico de barrido) en estos espacios ocultos a simple vista, más intenso se vuelve el recuerdo.
Como motivo para el trabajo espacial, he elegido formas de silicato, que han sido el constituyente básico de las zonas ricas en arcilla desde el Precámbrico y cuya visualización sólo fue posible con el desarrollo de la microscopía electrónica de barrido.
Tras ampliar 5.000 veces los organismos unicelulares, la imagen se inclina y aparecen formaciones que recuerdan a grandes estructuras como los arrecifes de coral. La diversidad estética y la compleja estructura de estas formas de silicato impresionan en la era digital. El deseo de dar forma tridimensional a estas secciones de imagen me vino al mirar el SEM. Las imágenes desconocidas que surgen de las ampliaciones extremas representan complejos sistemas de orden alejados de los órdenes lineales y permiten vislumbrar el futuro de las cosas. En el campo del jardín de meditación, la memoria y el presente se tocan y se encuentran.
Estrellas flotantes
Esta obra espacial consta de dos estelas de cuatro partes modeladas libremente. *»flotante», ya que el sonido parece estar en movimiento congelado. Se extiende en sentido horizontal o vertical, como si aún pudiera modelarse, moverse. Así, «flotar» encarna el estado previo y durante la creación de una escultura de arcilla. |
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